LANCE
YUKI
"¿Qué haces? ¿Qué dices? Eso no es así. No, no. Déjame a mi"
CLAN YUKI
HOMBRE
17 AÑOS
ALDEA YUKIGARE
NINJITSU ELEMENTAL
SUITON
B-
APARIENCIA FÍSICA [OPCIONAL]
Lance es un adolescente, de estatura estándar alcanzando 1,73 metros y de peso 71 kilogramos. De rostro redondeado, de rasgos suaves y ojos azul claros. Su tez morena hace juego con su cabello que es castaño, desgastado por el aire salado del mar, que crece asimétrico y desordenado, más largo en el lado derecho que suele arreglar con dos finas trenzas de poca ornamenta.
De complexión espigada y atlética, con piernas y brazos largos, de músculos fuertes pero no bultosos ni exuberantes, fibrados por el entorno desafiante en el que ha tenido que madurar.
PB: Lance de Voltron (FanArt alternativo no canon)
PERSONALIDAD
El adolescente conocido como Lance tiene una personalidad alegre, jovial, atrevida y hasta algo conflictiva. Mientras otros le tachan de irrespetuoso por su pedantería o de soberbio por su vanidad injustificada, él ve la salud de la bendita juventud que los más chapados a la antigua no podrían comprender. Levemente arisco no suele aceptar ni enseñanzas ni los métodos de actuar de otras personas.
Pese a esto, Lance no deja de ser un adolescente, con inquietudes e inseguridades todo el tiempo, siempre en la búsqueda de llenar el orgullo y honor que dejó en hueco su padre, para dejar ir las sombras y poder iluminar su linaje. ¡Ah, pero no va a esperar a que ese momento llegue!
HISTORIA
La costa de Yukigara recibía muchos nombres, normalmente dados después de una tragedia, pues era normal enfrentarse a peligros amenazantes si el mal tiempo te atrapaba, como tramposas islas de nieve o grandes agujas de hielo que se escondían arqueadas entre las olas, por ello normalmente se asignaba a un grupo de guerreros del clan Yuki a entrenarse y proteger a los humildes pescadores que poblaban ese arrecife congelado.
Eventualmente la reputación de estos Yuki en la costa de Yukigara fue muy debatida entre los pescadores, algunos les llamaban héroes por haberlos salvados, otros consideraban que eran tiranos opulentos por prohibirles salir a cazar o pescar en noches tormentosas, pero la realidad era que, mínimo en secreto, todos aceptaban que estaban ahí por su bien. Al menos, hasta que Lance llegó, un niño de 6 años normalmente con la cara pintada tradicionalmente, de coleta, tez morena y cabello castaño oscuro, al que le bastaba una mirada de re filón para ver su honor herido, que si bien muchas de sus causas eran justas, como defender a perros callejeros de las piedras de unos maleantes o devolver la muñeca de una niña asaltada por bravucones de su edad, no todas eran tan nobles como el chico pretendía hacer creer a su padre, uno de los Yuki que estaban en la zona.
Lance no era de los que evitaban problemas, al revés, eran de los que iban a por ellos con todas. A pesar de los líos que causó a su progenitor, no se detuvo. No hasta el día en que su padre se fue. Por razones desconocía y que personalmente no comprendía, su padre abandonó el puerto y a todo el clan, llevándose consigo a varios de los miembros del clan Yuki que protegían el puerto, fue un golpe en el estómago para el muchacho, inesperado, prohibido, inexplicablemente doloroso y tortuoso. Avergonzado de si mismo se quedo en los muelles, educándose con los pescadores y cuidado por los ninjas que se quedaron, volviendo el recuerdo de la ida de su padre uno difuso pero a la vez muy culpable.
Cuando alcanzó los 16 años, su mente ya viajaba a una escala mucho mayor que en su infancia, tenía metas y una de ellas fue unirse a los miembros del Clan Yuki como correspondía, siendo un graduado de la Academia Ninja de Yukigara. Regresó de la costa a la Aldea, donde, acompañado de uno de los guerreros portuarios, fue aleccionado para convertirse en un shinobi, lo que realmente, fue menos difícil de lo que parecía, el niño tenía una afinidad con el ninjitsu, y eventualmente con gran orgullo que lo impulsaba a dar más y más, algunas veces para impresionar a sus maestros, otras para humillar a sus compañeros, logró alcanzar su objetivo. Graduado, ¡Lance lo tuvo decidido! ¡No iba a pararse ahora, pues toca embarcarse en su viaje hasta convertirse en un ninja de Leyenda, como su padre hubiera querido!
GUSTOS
✘ Le gusta actuar a su manera
✘ Le gusta hacer reír y alegrar a las personas
✘ Le gusta hacer bromear, pese a que llega ser cruel
✘ Le gusta enseñar a otros su forma de actuar
✘ Le gusta la costa marina tanto como las armas
DISGUSTOS
✘ No le gustan las críticas
✘ No le gustan las tácticas de otros Clanes
✘ No le gusta ser interrumpido
✘ No le gusta que le ignoren
✘ No le gusta hablar de su familia.